A propósito del día internacional del suicidio, es muy importante abordar las complicaciones psicológicas y mentales que pueden llevar a una persona a percibir la muerte como una alternativa de solución.

Múltiples son los casos en la consulta psicológica clínica, en donde los usuarios o pacientes en algún momento han manifestado sus deseos de ya no seguir viviendo, ante esta situación los terapeutas no inician una labor de convencimiento hacia la vida, tampoco pretenden disminuir la importancia de este dicho en el consultorio, por el contrario, ahí donde una persona manifiesta su deseo de morir, es una oportunidad única para comenzar a explorar qué ideas o situaciones lo han llevado a concluir, que dicho acto es la alternativa para sus dolores, sufrimientos o males.

Desde los fundamentos de la terapia cognitivo conductual se sabe, que una acción es realizada como una consecuencia de una serie de pensamientos o las bien llamadas creencias. Estás creencias pueden surgir a partir de un evento único en la vida, por ejemplo, una ruptura amorosa, o bien, constituirse a partir de un conjunto de experiencias a lo largo de la vida, historias o cultura familiar o social; pero entonces ¿qué ideas persiguen a las personas que en algún momento han pensado en el suicidio?

Si bien es cierto que todas las experiencias de vida son integradas mentalmente de formas muy diversas en las personas, se ha encontrado una constante en aquellas personas que pretenden acabar con su vida. Las creencias de que la muerte va a acabar con el dolor, de que al morir encontraremos alivio y un lugar mejor; “un descanso eterno”, pueden llevar a las personas al punto de quiebre, en donde su realidad actual les parezca tan cansada y tan absurda que entonces desean optar por ese lugar de descanso y alivio eterno. Es cierto que esta es una creencia popular, en ocasiones respaldada por la cultura y la religión, festividades como el día de muertos, rituales dentro de la cultura que nos hacen creer que una vida continúa o una vida nueva aparece después de morir, el tan anhelado alivio parece llegar con la muerte.

Por otro lado, la creencia arraigada de que se han acabado todas las opciones de solución, que la única que hace falta por probar es la muerte, empuja a las personas a realizar actos que atentan contra su vida, la falta de apoyo social , de información, de acceso a la justicia o de acceso a los servicios de salud mental, despiertan ideas de estar atrapados en una situación de la cual pareciera ya no hay alternativa, aunado a esto la falta de razones para vivir, generan en la persona un laberinto mental del cual no encuentran salida; con esto no se pretende decir que todos los casos sean iguales o encapsular un fenómeno tan complejo en una simple síntesis de ideas, lo que a cada persona le lleva a estas ideas es tan diversos y complejo como la vida misma.

Lo que se pretende establecer con este enfoque, es el reconocimiento de que el suicida, no es una persona tonta, no es una persona débil, no es una persona cobarde, no es una persona que no piensa en su familia, no es una persona que no quiera vivir, incluso podríamos decir que es una persona inteligente que ha intentado durante mucho tiempo encontrar solución a lo que vive, repasando tantas alternativas, intentando tantas cosas, luchando por tanto tiempo, a veces en compañía y a veces en silencio, que llega un punto en el que considera que la muerte es la solución, basta con cuestionarnos ¿cómo sería una vida en la que valiera la pena vivir? Para comprender que el anhelo por la vida siempre está presente, pero al carecer de posibilidades para acceder a esa vida que valga la pena, la mente entra en un mecanismo de rendición interna en donde se convence que lo mejor es morir, es así entonces que brindarles a las personas un espacio seguro, donde puedan sentir apoyo, aprender recursos para solucionar, cuestionarse sobre su vida, pero sobre todo sobre sus fantasías ante la muerte, logra un gran índice de recuperación.

Es por ello que te invitamos a ti o a cualquier persona que esté atravesando por una situación compleja donde la mente lo ha llevado este punto, a comunicarse con nosotros, hay miles de posibilidades que aún puedes explorar, posibilidades que pueden llevar tu vida a ese punto donde tú te sentirías satisfecho o satisfecha de poder vivir.

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