Mujeres y Neurodivergencias: Visibilizando la Diversidad en el Día Internacional de la Mujer

El Día Internacional de la Mujer no solo debe centrarse en la lucha contra la violencia de género o la equidad salarial, sino también en garantizar que todas las mujeres, incluidas las neurodivergentes, tengan la oportunidad de vivir con dignidad, comprensión y respeto.

El 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer, es una fecha para reflexionar sobre los avances y desafíos que enfrentan las mujeres en distintos ámbitos de la sociedad. Sin embargo, en esta conversación sobre equidad, hay un grupo que sigue siendo invisibilizado: las mujeres neurodivergentes.

El término neurodivergencia abarca condiciones como el Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH), el Trastorno del Espectro Autista (TEA), los problemas de aprendizaje y otras formas de procesamiento cognitivo que difieren de la norma. Aunque la neurodivergencia puede presentarse en cualquier persona, las mujeres suelen ser diagnosticadas más tarde o incluso pasar desapercibidas debido a sesgos de género en la ciencia y la sociedad.

Las mujeres neurodivergentes y el diagnóstico tardío.

Históricamente, la investigación sobre personas neurodivergentes ha estado centrada en hombres. Lo que ha llevado a que muchas mujeres pasen años sin un diagnóstico adecuado. En el caso del Trastorno por déficit de atención con hiperactividad (TDAH), por ejemplo, los estudios iniciales se enfocaron en niños con síntomas de hiperactividad, ignorando que muchas niñas presentan una sintomatología más internalizada, caracterizada por la inatención, la ansiedad y el perfeccionismo extremo.

Lo mismo ocurre con el Trastorno del espectro autista (TEA). Las niñas y mujeres autistas suelen enmascarar sus síntomas mejor que los hombres, imitando comportamientos sociales y esforzándose por encajar, lo que retrasa o impide un diagnóstico adecuado. Esto puede llevar a una serie de dificultades en la adultez, como ansiedad, depresión y agotamiento crónico.

Las mujeres neurodivergentes enfrentan múltiples desafíos en el ámbito académico, laboral y social. Muchas se ven obligadas a desarrollar estrategias de compensación que, si bien pueden ayudarles a adaptarse, pueden ser agotadoras. La presión por cumplir con expectativas sociales, ser organizadas, eficientes y emocionalmente disponibles, puede generar una sobrecarga mental significativa.

Además, la falta de comprensión y adaptación en entornos laborales y educativos impide que muchas de ellas alcancen su máximo potencial. Sin un diagnóstico o con un diagnóstico tardío, muchas mujeres han crecido sintiéndose “diferentes” sin entender por qué, lo que puede afectar su autoestima y bienestar emocional.

La importancia de la visibilización y el apoyo.

Reconocer la existencia y las necesidades de las mujeres neurodivergentes es un paso esencial hacia una sociedad más inclusiva. Esto implica:

  • Mayor acceso a diagnósticos y tratamientos adecuados. Es fundamental que los profesionales de la salud reciban formación con perspectiva de género para identificar correctamente la neurodivergencia en mujeres.
  • Espacios laborales y educativos inclusivos. La implementación de ajustes razonables, como ambientes menos ruidosos, tareas estructuradas y flexibilidad en las formas de trabajo, puede hacer una gran diferencia.
  • Apoyo emocional y comunidades seguras. Los grupos de apoyo y la divulgación sobre neurodivergencia en mujeres pueden ayudar a muchas a entenderse mejor y conectar con otras personas que compartan sus experiencias.

Un llamado a la equidad real

El Día Internacional de la Mujer no solo debe centrarse en la lucha contra la violencia de género o la equidad salarial, sino también en garantizar que todas las mujeres, incluidas las neurodivergentes, tengan la oportunidad de vivir con dignidad, comprensión y respeto. La inclusión comienza con la visibilización, y es hora de dar voz a quienes han sido ignoradas por demasiado tiempo.

En este 8 de marzo, hagamos un llamado a la equidad que abarque a todas las mujeres, independientemente de cómo perciban y experimenten el mundo. Porque la diversidad es parte fundamental de la lucha feminista, y reconocerla nos acerca a una sociedad más justa para todas.

Finalmente, si deseas saber más sobre el tema o deseas apoyo con alguna neurodivergencia, no dudes en acudir con nosotros la Asociación Mexicana de Psicología y Desarrollo Comunitario.

Nps. Adriana de Jesús Casas Moreno https://linktr.ee/psicologiaparati

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